La Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres del Alumnado (CEAPA) ha hecho hoy su tradicional balance del inicio del curso 2022-2023, un curso marcado por la implantación de la LOMLOE, el fin de las restricciones Covid y la necesidad de atender las consecuencias de la pandemia en la salud emocional del alumnado. La presidenta de CEAPA, María Capellán, ha estado acompañada por la vicepresidenta, la secretaria general y la tesorera de la Confederación, Leticia Cardenal, Virginia Romero y María Sánchez, respectivamente.

María Capellán ha aprovechado para reivindicar una ley de educación “que dé estabilidad al sistema educativo” y para ello, a su juicio, es necesario que la educación “sea una prioridad y no un cambio de cromos entre nuestros políticos”. Sobre la nueva ley implantada este curso, Capellán reconoce que llega “cargada de polémica”, pero asegura que la LOMLOE “se basa en la igualdad de oportunidades, en la inclusión de todo el alumnado y el aprendizaje por competencias, y eso es algo muy positivo para nuestro sistema educativo”.

Lo que sí preocupa a la mayor confederación de AMPA de la escuela pública son las desigualdades que ha traído la implantación de la LOMLOE dependiendo de la comunidad autónoma. Según ha explicado Capellán, hay varias comunidades en las que no se han aprobado a tiempo los cambios de normativa derivada de la LOMLOE, muchas comunidades han dejado la decisión de cambiar los libros de texto a la autonomía de Centro…”y todo esto está generando grandes desigualdades e incertidumbre entre las familias dependiendo de en qué comunidad residan”.

El gasto escolar derivado de la implantación de la LOMLOE es otra de las grandes preocupaciones de CEAPA en este curso, ya que hay algunas comunidades que han decidido cambiar todos los libros de texto y en otras lo han hecho de manera parcial. “Recordamos que la Constitución española, en su artículo 27.4, dice que la enseñanza básica es obligatoria y gratuita, por lo que no valen excusas como la autonomía de centro o la libertad de cátedra para obligar a desembolsar ni un solo euro. Nos estamos acostumbrando a que las familias paguen libros y materiales escolares sin que las administraciones apuesten firmemente por la gratuidad total, y eso sin hablar de los pagos que se piden para fotocopias, el papel higiénico, etc. Es inadmisible”, ha afirmado la presidenta de CEAPA.

Atención a la salud mental

Las familias de la escuela públicas están especialmente preocupadas también por las consecuencias emocionales que la pandemia está generando en los niños, niñas y adolescentes. “A pesar de que la cifra de alumnado que padece algún tipo de afección de salud mental se ha incrementado de forma desorbitada en estos dos años, vemos una importante falta de recursos”, ha recordado la presidenta, que lamenta que tan solo se aborde este problema “con la implantación de la figura del Coordinador de Bienestar, que viene a ser un docente con escasa o ninguna formación en la materia”.

CEAPA ha vuelto a reclamar un plan específico de atención a la salud mental, coordinado desde los ministerios de Educación y Sanidad, para abordar este tema en profundidad “y dar respuesta real a la problemática que nos preocupa a las familias”.

Alimentación escolar

“Hay alumnado con escasos recursos económicos para el que la única comida completa que hace al día es la del comedor escolar”, ha recordado la presidente de CEAPA, “de ahí la importancia de velar por la salud de nuestros hijos e hijas prestando más atención a la alimentación escolar”. También en este tema ha encontrado CEAPA importantes diferencias entre comunidades autónomas: desde la forma de elaborar los menús, hasta quién ostenta la gestión del comedor o el sistema de becas y ayudas para alumnado. Lo que sí es común a todos los territorios, según CEAPA, es que no hay subidas generalizadas significativas en el precio del menú a pesar de la inflación y también que, salvo en algunos territorios, son las macroempresas de catering las que gestionan grandes lotes de comedores, “lo que supone una merma significativa de calidad y cantidad respecto a los comedores gestionados por las AMPA y las Federaciones”, ha señalado Capellán.

Participación de las familias

La Confederación ha pedido también a la ministra de Educación “que promueva de una vez por todas una normativa específica y actualizada sobre participación, que fomente el asociacionismo entre las familias y recoja los derechos y obligaciones que tenemos las familias en los centros educativos”. Según la presidente de CEAPA, en estos años “las familias hemos visto cómo se nos cerraban las puertas los centros educativos y no podíamos participar de manera activa en el día a día. Es hora de cambiar eso”. CEAPA también exige que se dote a las AMPA y las federaciones territoriales de “un local digno” donde instalarse y poder dar servicio a sus socios, y que “en todos los presupuestos autonómicos se incluyan ayudas destinadas al movimiento de padres y madres, ya que hacen una gran labor de voluntariado y sin ánimo de lucro”.