CEAPA ha celebrado este pasado fin de semana su asamblea del primer trimestre del año, así como posteriormente una nueva reunión de su Junta Directiva, como es habitual. En dichas reuniones se ha debatido el resultado obtenido con la convocatoria de huelga general educativa del pasado 9 de marzo, así como se han decidido nuestros siguientes pasos a dar para continuar la lucha contra los recortes y la imposición ideológica del modelo LOMCE. Ambas cosas, que son dos caras de la misma moneda, han sido de nuevo ampliamente rechazadas por la Comunidad Educativa y por la inmensa mayoría de la sociedad.

La huelga del 9 de marzo ha sido un éxito claro que el Gobierno del Estado solo ha podido intentar deslegitimar afirmando que no ha existido porque nadie la ha seguido. Es evidente que siguen intentando vender un país que no existe, pero las familias sabemos de sobra lo que ha sucedido en realidad en los centros educativos y esto no es otra cosa que un paro educativo ampliamente respaldado.

CEAPA quiere felicitar a las familias por el amplio respaldo a la huelga. Nuestros hijos e hijas, el alumnado, han demostrado de nuevo que no aceptan la pérdida de sus derechos y que luchan para evitarlo. Las organizaciones estudiantiles han demostrado estar en un momento de fuerza muy importante y evidente, fuerza que el Gobierno hace mal en desoír, porque negar la realidad no hace que ésta desaparezca. Y los padres y madres les hemos apoyado claramente en los cursos y etapas en las que pueden legalmente decidir colectivamente no asistir a clase, es decir, hacer huelga de estudiantes, así como hemos tomado de nuevo la decisión de no llevarlos a los centros educativos de forma muy masiva, demostrando también nuestra fuerza.

Por tanto, CEAPA quiere felicitar al alumnado y agradecer a las familias que hayan entendido la necesidad de hacer esta huelga y la hayan llevado a cabo. Agradecimiento obligado porque somos conscientes del coste económico y humano que la huelga en el ámbito educativo tiene para las familias. Coste económico muy alto para quienes emplean días de vacaciones o de asuntos propios para poder quedarse con sus hijos e hijas. Incluso asumir gastos de entidades privadas o personas que les atiendan ese día. Cantidades económicas que nunca se cifran pero que existen y son muy importantes. Y también costes humanos porque supone alterar agendas o pedir ayuda a los familiares para que ayuden a poder secundar la huelga.

Por último, CEAPA quiere agradecer al profesorado que realmente hizo la huelga y al personal de los centros educativos que también se sumó a la misma, así como a las organizaciones sindicales que les convocaron a ello, el esfuerzo realizado en un sector que debe recuperar sus niveles de movilización perdidos. No obstante el agradecimiento anterior, CEAPA rechaza el comportamiento de todos aquellos que se dedicaron a intentar boicotear la huelga, sin éxito pero con mucho daño para la convivencia de la Comunidad Educativa, mediante amenazas al alumnado y sus familias con repercusiones negativas si no se asistía a clase y con exámenes improvisados puestos expresamente el día de la huelga para intentar evitar el vaciado de las aulas.

Existe el derecho a realizar la huelga y también a trabajar, y CEAPA defiende ambas cosas, pero el boicot a la huelga es una actuación éticamente reprochable y legalmente perseguible cuando se hace mediante la amenaza y la coacción, en especial hacia los menores. Por ello, los servicios jurídicos de CEAPA están a disposición de las asociaciones de padres y madres que deban denunciar dichos comportamientos. Además, exigimos que dichas actitudes claramente antidemocráticas no se vuelvan a producir. Si se quiere apoyar la LOMCE y los recortes en la educación, es legítimo, pero solo usando los cauces democráticos, como los que hemos usado quienes hemos convocado y realizado la huelga en contra de todo ello.

Madrid, 13 de marzo de 2017